Ya pasamos el primer día de campamento. Despues de que los padres dejaran a sus hijos en Finca Caruana, nos encontramos por primera vez todos juntos en la comida -de primero una fresca ensalada con mortadela, y de segundo unos espaguetis a la carbonara que estaban deliciosos-. Despues de la comida, realizamos diversos juegos que nos ayudaron a conocernos, ya que este año en el campamento nos encontramos con niños de diferentes lugares: Lorca, Murcia, San Pedro del Pinatar, Puerto Lumbreras... Despues disfrutamos de un rato de piscina que nos sirvio para refrescarnos y pasar el calor de la tarde. Y ya, fresquitos y limpitos, celebramos como todos los domingos la Eucaristía y nos fuimos a cenar - tortilla de patatas y salchichas con tomate- Despues de los juegos nocturnos nos fuimos a la cama, donde descansamos estupendamente hasta esta mañana. Pero eso ya es otra historia que mañana os contaremos.
Este campamento es una gran oportunidad para que los niños y niñas con menos recursos económicos puedan convivir en un ambiente cristiano durante algunos días en el verano. Gracias, Juan Carlos, por ayudar a sus padres a transmitirles la fe, sobre todo la fe en el amor a los seres humanos, a todos los seres humanos.
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